La urgencia para las autoridades locales es que se avecina el segundo semestre y con esto la llegada de la cosecha cafetera, en donde suele verse una mayor actividad en el sector, especialmente durante los fines de semana.
En busca de garantizar mejores condiciones de seguridad a los habitantes del Socorro y mejorar la imagen del municipio para propios y visitantes, la Alcaldía viene adelantando una serie de controles cobre los negocios ubicados sobre la avenida nacional, más conocida como la carrera 17.
La zona, que es además la vía de acceso al municipio, cerca a la Terminal de Transporte Terrestre, se convirtió con el paso de los años en el epicentro de algunos negocios dedicados a la venta de servicios sexuales, camuflados en establecimientos de venta de alcohol.
Las instrucciones para la Policía Nacional, la Inspección de Policía y la Secretaría de Gobierno es ir acabando con este fenómeno. El alcalde Ángel Acevedo manifestó que no se entiende en qué momento las administraciones permitieron que estas actividades proliferaran en un sector tan público y que es el punto de acceso a la capital de la provincia Comunera, por donde literalmente todo el mundo tiene que pasar.
Según el plan de ordenamiento, estos negocios deberían establecerse en la parte de atrás de la plaza de ferias, pero esto nunca se cumplió.
La urgencia para las autoridades locales es que se avecina el segundo semestre y con él la llegada de la cosecha cafetera, en donde suele verse una mayor actividad en el sector, especialmente durante los fines de semana.
“No se permitirá el funcionamiento de ningún tipo de estos establecimientos o parecidos en el sector”, dijo el mandatario, haciendo referencia también al auge de negocios dedicados al alquiler de habitaciones en el sector, que sirven como aliados a la masificación de la prostitución.
Acevedo indicó que, aunque entiende la responsabilidad legal del derecho al trabajo, es necesario garantizar que, si existe un negocio de venta y consumo de bebidas, esto se cumpla y no se use para otras cosas.
Las mismas medidas con las que se espera eliminar del todo la venta de servicios sexuales se está tomando en otro sector del municipio, la carrera 14 (en la parte baja del Colegio Universitario del Socorro), en donde se vienen presentando actividades nocturnas, aunque no de lenocinio.
Hasta ahora, los controles sobre la vía nacional que iniciaron en febrero han generado que cuatro de los 14 negocios contabilizados en la zona cerraran sus puertas de forma voluntaria.
A los negocios restantes se les pidió que aclararan su actividad comercial ante la Cámara de Comercio de Bucaramanga y después de esto se iniciarán los controles de cierre si no cumplen con la ley.
Orden legal
El pasado 1 de abril la administración municipal emitió el decreto 047 en el que estableció horarios para el funcionamiento del comercio en el municipio y dejó establecido que los negocios dedicados a la prostitución no pueden funcionar en la vía nacional.
El documento establece que de acuerdo con el Esquema de Ordenamiento Territorial, EOT, se prohíbe “el funcionamiento de establecimientos de comercio cuya actividad comercial sea casa de lenocinio, bar, cantina , tabernas, discotecas, karaokes en el sector que comprende entre la calle 9 y la calle 16 con carrera 17, sobre la vía nacional”.