Ante la caída en las ventas de vivienda, el arrendamiento se ha convertido en una alternativa atractiva para muchas personas. los contratos de arrendamiento en Colombia crecieron con un mayor dinamismo en apartamentos y casas.
El panorama del sector vivienda en Colombia no es alentador. Según el informe presentado por la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), las ventas de vivienda nueva en el país registraron una caída del 44,9 % en 2023.
Se vendieron 106.554 viviendas menos que en todo 2022. Es decir, que los hogares invirtieron $20 billones menos en compra de vivienda que un año antes. Esta cifra representa el menor número de ventas desde 2013.
El informe revela que la mayor afectación se concentró en el segmento VIS (Vivienda de Interés Social), con una reducción del 52,4 % en las ventas, mientras que el segmento No VIS presentó una caída del 34,4 %.
En cuanto a las ciudades, Bogotá, Medellín y Cali fueron las que más sufrieron la caída en las ventas, con disminuciones del 47,4 %, 46,2 % y 44,2 %, respectivamente.
Arriendos en Colombia
Estos datos contrastan con las familias que accedieron a contratos de arriendo el año pasado. De acuerdo con la Federación Colombiana de Lonjas de propiedad Raíz, Fedelonjas, hubo un crecimiento de 11% en los contratos de arrendamiento.
Los arriendos de apartamentos crecieron 11,5%, mientras que los que decidieron arrendar en una casa, aumentaron 11,3%.
Sin embargo, analistas señalan que para la actual vigencia crecen las expectativas de la venta viviendas, que incluso estaría por encima que las oportunidades de arriendo, por los menos para los estratos 4, 5 y 6.
Se espera que para el segundo semestre el mercado se active con la caída de las tasas de interés.
Aunque para los expertos este comportamiento positivo debe ser complementado con las condiciones de desarrollo económico que necesita el país, para que el crecimiento sea significativo.
Tomar decisiones
“Por el lado de las condiciones económicas, la desaceleración de la inflación y dos meses consecutivos de reducciones en las tasas de interés del Banco de la República son factores que contribuirán a alinear el escenario para la compra de vivienda. La tasa de interés es fundamental en la decisión de inversión de los hogares”, dijo Guillermo Herrera, presidente ejecutivo de Camacol.
A la hora de tomar decisiones sobre adquirir vivienda propia o acceder a un contrato de arriendo, no solo es decisivo las tasas de interés y los plazos que ofrecen los bancos para acceder a créditos, sino la variable en los cánones de arrendamiento.
“Al revisar la variación de los cánones de arriendo, a diciembre este alcanzó un 7,64 %, la mayor variación anual de por lo menos los últimos seis años. Esto fue explicado por varios factores, el principal fue el reajuste permitido por norma que define como límite la inflación del año inmediatamente anterior, es decir, 13,12 %”, dijo Kelina Puche, directora de la Lonja de Propiedad Raíz en Barranquilla.
Puche destacó que, el hecho de que los precios de las viviendas están bajando en algunas regiones y los precios de alquiler estén subiendo, sugiere que la gente está prefiriendo alquilar en lugar de comprar.
Según las cifras de Fedelonjas, los hogares que viven en arriendo crecieron 45 % en los últimos años y estima que siete millones de familias que están arrendadas.
¿A qué se atribuye esta caída?
Diversos factores han contribuido a la contracción del mercado inmobiliario colombiano. Entre ellos se destacan:
Altas tasas de interés: El aumento de las tasas de interés por parte del Banco de la República ha encarecido el crédito hipotecario, lo que ha dificultado el acceso a la vivienda para muchas familias.
Inflación: El elevado nivel de inflación en Colombia ha impactado el poder adquisitivo de los hogares, reduciendo su capacidad de compra de vivienda.
Reforma tributaria: La incertidumbre generada por la reforma tributaria ha frenado la inversión en el sector construcción.
Desconfianza del consumidor: La situación económica actual ha generado desconfianza en los consumidores, quienes están posponiendo la compra de vivienda.
Compradores:
Evaluar cuidadosamente su capacidad financiera antes de adquirir una vivienda.
Buscar alternativas de financiación como los subsidios de vivienda.
Comparar precios y ofertas en diferentes proyectos.
Inquilinos:
Buscar un inmueble que se ajuste a sus necesidades y presupuesto.
Negociar el canon de arrendamiento con el arrendador.
Leer cuidadosamente el contrato de arrendamiento antes de firmarlo.