Una determinación del Invima ordena limitar en un 50 % el sacrificio de reses en la planta de Villanueva, ante la falta de suficiente capacidad en la cadena de frío.

Un duro golpe recibió la venta de carne legal en las provincias Guanentá y Comunera por causa del requerimiento que recibió la planta de sacrificio animal de Villanueva, en donde se procesa gran parte del ganado que se consume en la región.

Los responsables de la operación del establecimiento recibieron la orden del inspector del Invima, luego de una visita sorpresa, de limitar el despacho de carne de canal en caliente si no se contaba con la cadena de frío.

Edwin Gabriel Dizzet Navarrete, operador de la planta, explicó que todo obedece a la exigencia prematura de los establecido en el decreto 2016 de 2023, que establece que para el despacho de la carne en canal, la cadena de frío debe estar a una temperatura de 5 grados celsius.

Como la planta beneficiaba a municipios cercanos, este procedimiento no se estaba cumpliendo, entendiendo además que la mayoría de plazas de mercado no cuentan con cuartos de refrigeración, como ocurre con San Gil.

Dizzeth explicó que el año pasado el Invima, en respuesta a un derecho de petición, otorgó un plazo de 12 meses, “contados a partir de la expedición de los lineamientos técnicos correspondientes”.

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El vocero de la planta de sacrificio dijo que no entienden entonces cómo, si los lineamientos acaban de ser establecidos y apenas hace un mes les dieron un año de plazo, ahora los castigan ahora al limitar la capacidad de sacrificio en un 50 %.

En el establecimiento de Villanueva se estaban sacrificando cerca de 70 animales diariamente y ahora, con la nueva directriz, solo podrán llegar a 36, que es la capacidad del actual cuarto de refrigeración.

En caliente solo se podrá despachar para Villanueva. Municipios como el Socorro, Charalá, Guavatá y otros que están a más de una hora de distancia serán los más afectados porque para poder sacrificarles las reses tendrán que reducir el despacho para municipios como San Gil.

Dizzeth expresó que harán una solicitud al Invima para que la medida sea levantada y se respeten los 12 meses de plazo.

Mientras tanto, al funcionario le preocupa que con esta clase de situaciones se esté incentivando el sacrificio ilegal.

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