Mientras se mantiene la alerta nacional por la propagación de la enfermedad, en el departamento se estableció un plan para mitigar sus efectos.
Desde la Secretaría de Salud de Santander se informó que actualmente no se han registrado casos confirmados de fiebre amarilla en el departamento.
Sin embargo, una de las acciones que se emprendió por parte de las autoridades de salud es la intensificación de la vacunación. Dicho biológico está incluido en el esquema nacional de vacunación y se trata de una dosis única que brinda inmunidad y protección de por vida, sin necesidad de refuerzos.
Desde la Gobernación de Santander se afirmó que la vacuna está disponible en todas las IPS vacunadoras del departamento y está dirigida a:
● Personas desde los 9 meses de edad, incluyendo adultos mayores de 60 años, que habiten, transiten o se desplacen a municipios en alerta o alto riesgo, ya sean nacionales o extranjeros.
● Personas de 1 a 59 años que viven en municipios no clasificados como de alto riesgo y que no han recibido la vacuna previamente.

Según reportes de la Secretaría de Salud Departamental, durante 2024 se aplicaron 41.300 dosis de la vacuna y desde el 1 de enero hasta el 31 de marzo pasado iban administrados 12.507 biológicos en Santander. La cifra total de inmunizados es de 53.807 personas.
Por su parte, se mantiene la alerta en 25 poblaciones con riesgo en Santander. Estas son: Barrancabermeja, Bolívar, Bucaramanga, Charalá, Cimitarra, Coromoro, El Playón, Floridablanca, Florián, Girón, Jesús María, Jordán, La Belleza, Landázuri, Piedecuesta, Puerto Parra, Puerto Wilches, Rionegro, Sabana de Torres, Santa Helena del Opón, San Vicente de Chucurí, Socorro, Suratá y Vélez.
Para el caso de estos municipios se establecieron medidas especiales que deberán ser ejecutadas por las autoridades territoriales:
● Las IPS de estos municipios deben garantizar la aplicación de la vacuna todos los días, sin barreras para la población priorizada.
● En menores de 9 a 11 meses y 9 días, se deberá realizar el interrogatorio habitual para evaluar condiciones médicas que puedan contraindicar la aplicación del biológico.

● Las entidades territoriales municipales deben elaborar e implementar un plan de acción articulado con el PAI, las EAPB, IPS y demás actores de salud.
● Se deben implementar estrategias extramurales e intramurales y jornadas intensivas de vacunación, focalizadas según el nivel de riesgo.
● Es fundamental informar, motivar y orientar a la comunidad sobre el riesgo existente, así como realizar acciones de demanda inducida.
Actualmente se cuenta con 195 puntos de vacunación habilitados en el departamento de Santander.