La orden de desalojo se dio el martes en la noche en San Gil.
Diez familias del conjunto cerrado Villa Campestre tuvieron que desalojar de emergencia sus apartamentos debido al riesgo de caída de rocas que se presenta en una zona común en la parte alta del complejo habitacional.
La orden de desalojo se dio el martes en la noche luego de que una gran roca ingresara a uno de los apartamentos, llevándose la pared y varios objetos de la vivienda, dejando una persona herida. Mientras se atendía la emergencia, a pocos metros, otra roca golpeó contra otro apartamento.
John Harold Torres Céspedes, coordinador de Comité de Atención de Emergencias y Desastres del municipio, tras una reunión en la mañana de ayer, dijo que por ahora la orden es que las familias que viven en los pisos 1 y 2 de los cinco bloques en riesgo se mantengan fuera de sus casas y mientras tanto las dos constructoras que adelantaron el proyecto les darán opciones para pasar la emergencia, preferiblemente en apartamentos dentro del miso conjuntos.

Rogando que la intensidad de las lluvias disminuya, ahora las empresas y la administración firmaron un acta de compromiso para activar las pólizas, adelantar los trabajos de mitigación inmediatas como el retiro de las piedras sueltas y evaluar todo el tema técnico de los edificios.
“Eso es un área común de la propiedad, con un muro de gaviones revestidos, y una corona con cemento y piedra pegada”, dijo Torres, tras la evaluación de la topografía del sector.