Ambos carriles de la vía Bucaramanga – San Gil fueron habilitados. Las corredores viales Bucaramanga – Matanza y Lisboa – San Vicente también operan pero bajo ciertas recomendaciones de las autoridades.
Vías colapsadas, conductores atrapados e inundaciones son algunos de los estragos que ha dejado en Santander el aguacero que cayó entre la noche del viernes y madrugada de este sábado.
De acuerdo con los reportes que los ciudadanos compartieron a través de redes sociales, fueron varios los corredores de la región que han estado afectados por las intensas lluvias.
Vía Bucaramanga – San Gil – Bogotá
La emergencia se presentó en el tramo de Pescadero, específicamente, en el sector conocido como puente Quebrada Seca kilómetro 58; metros adelante de Menzuly.
Sobre las 4:15 p.m., en un parte entregado por la Policía de Tránsito dey Transporte de Santander se conoció que ya fue habilitado en ambos sentidos esta vía que comunica a Bucaramanga con San Gil
Esto se da luego de la atención a los dos puntos de caída de rocas ubicados en el kilómetro 58 y 62.
Allí, como consecuencia de las fuertes lluvias, se registró un deslizamiento de tierra y enormes rocas que bloqueó durante más de cuatro horas el paso tanto vehicular como peatonal, en ambos sentidos del corredor.
Hacia las 12:15 de la tarde, el Instituto Nacional de Vías, Invías, habilitó el paso vehicular en un carril, por lo cual los conductores deberán tendrán que tener paciencias para movilizarse por esta vía.
Se calcula que diariamente por esta vía nacional, además de los vehículos de carga y de pasajeros que van al interior del país, se movilizan unas 10.000 personas desde la región hacia Bucaramanga para realizar temas personales, por lo que en emergencias como esta la afectación es muy alta y difícil de cuantificar.
De acuerdo con la Sociedad Santandereana de Ingenieros, SSI, sobre este tramo se están haciendo unos estudios y diseños para mejorarlo en cuestión de conectividad. Los análisis más allá del tema de movilidad también se hacen desde el punto de vista geológico e hidrológico, toda vez en la zona se encuentran varias cuencas.
«En el sector hay varias cuencas que representan una amenaza grande, la alerta va encaminada a monitorear los sectores aledaños y para que se hagan las obras de contención pertinentes, porque son varios los tramos que están en alto riesgo», aseguró Rubén Torres, ingeniero especialista en geotecnia de la SSI.
Vía Bucaramanga – Matanza
Otras de las vías gravemente afectadas por las lluvias es la que conecta a Bucaramanga con la provincia de Soto Norte, es decir con los municipios de Matanza, California, Charta, Suratá, Vetas y Tona.
Esta vía fue habilitada en ambos carriles, pero por las condiciones de lluvia y barro en la zona, solo pueden transitar vehículos con tracción tipo 4×4, según el reporte entregado por el Mayor Carlos Ernesto Vergara Vélez, jefe de la Seccional de Tránsito de la Policía Metropolitana de Bucaramanga. Además se recomienda prudencia a los conductores que tomen esta vía.
A través de redes sociales los ciudadanos reportaron que algunos motociclistas y vehículos pequeños quedaron atrapados. Ante esta situación, residentes del sector emplearon cuerdas y otras herramientas para ayudar a desenterrar los vehículos.
Según informaron las autoridades, hacia las 12:20 p.m., se habilitó el paso para vehículos 4×4 y se está coordinando los trabajos de remoción con maquinaria del Batallón de Ingenieros Caldas.
Vía Bucaramanga – Rionegro – El Playón
En este corredor vial, según el reporte de las autoridades, se registró la caída de árboles y postes de energía, por lo cual el paso de vehículos está restringido; esto como medida de seguridad.
Cabe precisar que esta emergencia afecta la movilidad y conexión desde la capital santandereana hacia la Costa Caribe.
San Vicente de Chucurí
Las emergencias se registraron en la vía Lisboa-San Vicente, a la altura del sector conocido como El Tablazo, en donde se presentó un deslizamiento de lodo y rocas que provocó el cierre de la carretera.
En la mañana de hoy comunidades y transportadores se dieron a la tarea de retirar parte del material que había en la vía, para habilitar el paso.
Según el reporte oficial, la vía fue habilitada en ambos sentidos, pero no se recomienda el flujo de vehículos livianos por cuenta de las difíciles condiciones del terreno. En ese sentido, tan solo los vehículos con tracción 4×4 podrían transitar sin inconvenientes.
“La montaña se vino abajo, se trajo, arboles, roca y lodo; la misma comunidad y transportadores ayudaron a mover las piedras más grandes para dar paso; ahora se puede pasar pero hay que transitar con precaución porque aún hay material en la vía”, dijo un poblador a través de un video publicado en redes sociales.
Las autoridades de Gestión del Riesgo de Desastres de Santander, continúan monitoreando las zonas afectadas y determinando las soluciones que se van a implementar para superar estar contingencia en la región.