Modelo de OnlyFans mató a cliente mientras hacían video sexual fetichista; el hombre le había pagado más de 220 mil pesos para envolverlo en plástico.

o que debía ser una noche de placer extremo se convirtió en una escena sacada de una película de terror. Michaela Brashaye Rylaarsdam, una modelo de OnlyFans de 31 años, enfrenta cargos por asesinato en segundo grado tras la muerte de Michael Dale, un hombre de 55 años, quien la contrató para grabar un video fetichista de BDSM en el que sería envuelto en plástico. Pero el juego de sumisión escaló a un punto sin retorno.

Lo que parecía un acuerdo entre adultos se transformó en una sentencia de muerte envuelta en celofán.

Dale, un empresario retirado y ferviente seguidor de los fetiches de inmovilización, transfirió 11 mil dólares (más de 220 mil pesos) a Rylaarsdam para que lo envolviera completamente en plástico y cinta adhesiva mientras grababan la sesión. Según el acuerdo, él quedaría inmovilizado durante varios minutos mientras ella realizaba actos eróticos cerca de su cuerpo.

Ocho minutos después de que fuera completamente envuelto, Dale dejó de responder. Lo que debía ser un juego se convirtió en una lucha silenciosa contra la muerte. La cinta bloqueó su capacidad de respirar y el plástico selló su destino.

Mientras él se debatía entre la vida y la muerte, Rylaarsdam siguió grabando.

El video que lo reveló todo

Las autoridades han confirmado que la modelo de OnlyFans no detuvo la grabación de inmediato. El metraje muestra a Dale convulsionando, luchando por inhalar aire. Aún así, Rylaarsdam continúa con la filmación durante varios segundos más antes de darse cuenta de la gravedad de la situación.

Fue entonces cuando el horror se hizo tangible.

Al percatarse de que su cliente estaba inconsciente, llamó frenéticamente al 911 e intentó maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP), pero ya era demasiado tarde. Dale fue trasladado al hospital con muerte cerebral y días después su familia decidió desconectarlo del soporte vital.

La defensa de Rylaarsdam sostiene que todo fue consensuado y que ella no tenía intención alguna de causar daño. Su abogado asegura que la modelo no tenía experiencia en prácticas extremas de BDSM y que seguía instrucciones de Dale, quien parecía controlar la situación hasta que fue demasiado tarde.

Sin embargo, la fiscalía argumenta que ella debió haber actuado antes y que su retraso en pedir ayuda demuestra un nivel de negligencia que la hace responsable de la muerte.

El caso ha desatado una ola de preguntas sobre los límites del consentimiento en las prácticas extremas y el peligroso mundo del contenido fetichista en plataformas de suscripción.

Rylaarsdam y su esposo, Brandon, operaban un perfil de contenido para adultos en OnlyFans, donde subían videos personalizados para suscriptores. Aunque no se ha confirmado si el video de la muerte de Dale fue publicado o compartido, la plataforma ha sido cuestionada por permitir contenido con prácticas extremas.

Ahora, Rylaarsdam espera su juicio sin derecho a fianza en una celda donde las paredes de concreto no se parecen en nada al plástico que envolvió a su víctima.

El mundo del placer extremo cruzó la línea del peligro… y no hay vuelta atrás.

 

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