Una coreografía ardiente, un estadio encendido y una escena que desató comentarios en todo el país. Lali Espósito lo dio todo en Vélez, pero lo que nadie esperaba era la reacción de su novio, Pedro Rosemblat.
En una noche que quedará grabada en la historia del pop argentino, Lali Espósito volvió a demostrar por qué es una de las artistas más imponentes del continente. Su presentación en el estadio de Vélez Sarsfield fue mucho más que un concierto: fue una declaración de poder femenino, libertad escénica y, sobre todo, autenticidad. Pero no todo fue música, luces y ovación. Uno de los momentos más comentados del show, y que incendió las redes, fue el número de la canción Ahora, donde la cantante realizó una coreografía íntima y provocadora con uno de sus bailarines. El público aulló de emoción. Las cámaras captaron cada segundo. Y muchos se preguntaron lo mismo: ¿qué pensará su novio de todo esto?
La respuesta no tardó en llegar.
El concierto en Vélez no fue uno más en la carrera de Lali. Con entradas agotadas, puesta en escena imponente y un repertorio que incluyó éxitos como Disciplina, N5 y Motiveishon, la artista presentó su último álbum No vayas a atender cuando el demonio llama ante miles de fanáticos. Pero fue durante Ahora cuando el clima subió de temperatura. Con movimientos coreográficos cargados de erotismo, Lali se sentó en el regazo de uno de sus bailarines, provocando gritos, memes y titulares al instante.
Para algunos, fue un acto de empoderamiento. Para otros, una escena subida de tono. Pero para Pedro Rosemblat, pareja de la cantante, fue un gesto artístico digno de aplaudir.
La respuesta amorosa y poética de Pedro Rosemblat
Lejos de los celos o los comentarios condescendientes, Pedro, periodista, humorista y figura política en ascenso, respondió con altura y poesía. A través de su cuenta de Instagram, publicó una sentida reflexión que rápidamente se viralizó entre los seguidores de la pareja.
“En el país más futbolero del planeta hay una ciudad que alberga la mayor cantidad de estadios en el mundo. No hay fecha, pero una cancha está llena. Donde suelen ubicarse los arcos hay un escenario. Y en el medio de ese escenario hay una mujer.”
La frase, acompañada por imágenes del concierto, fue interpretada por muchos como una declaración de amor, respeto y admiración hacia Lali. Y aunque Pedro no mencionó directamente la escena del show hot, el subtexto era claro: la aplaude, la acompaña y se enorgullece.
Pero las palabras no fueron todo. En videos tomados por el público, se lo vio bailando y coreando cada tema con entusiasmo, entre el público, sin pretensiones de figura pública. Sonreía, grababa, saltaba. Incluso algunos fanáticos captaron el momento exacto en que Pedro reaccionaba, con risas y complicidad, a la sensual escena con el bailarín. Nada de incomodidad. Nada de posesión. Solo un hombre disfrutando del arte de su compañera.
“Es el novio que todxs queremos”, escribieron usuarios en X. “El ejemplo de cómo se acompaña a una mujer poderosa sin opacarla”, dijeron otros.
Lali y Pedro confirmaron su relación a principios de 2024, luego de meses de rumores y señales sutiles en redes. Desde entonces, se han mostrado cómplices, divertidos y muy conectados emocionalmente, tanto en lo íntimo como en lo público. Vacaciones, entrevistas cruzadas, y hasta intercambios políticos con humor: su historia de amor representa a una nueva generación donde el éxito de una no resta al otro, y donde la autonomía es celebrada, no temida.
La escena hot con el bailarín pudo haber sido motivo de controversia, pero terminó siendo una plataforma para hablar de algo mucho más profundo: las nuevas formas de amar, acompañar y entender el arte sin tabúes. En lugar de alimentar el escándalo, Pedro y Lali lo convirtieron en un símbolo de madurez afectiva y respeto mutuo.
Mientras algunos aún discuten si fue “demasiado”, otros prefieren enfocarse en el verdadero mensaje de la noche: una mujer libre, una pareja sólida y un estadio rendido ante el talento.
Porque si algo quedó claro en Vélez es que Lali no está sola. Tiene a su público, a su arte… y a un compañero que sabe exactamente cómo estar.