Los nombramientos de los jefes de control interno se firmaron un día después de que se confirmó la salida de Jaime Andrés Beltrán de la Alcaldía de Bucaramanga.
En el segundo día en la Alcaldía de Bucaramanga, Eduard Jesús Sánchez Ariza, en calidad de alcalde encargado de la ciudad, revocó tres decretos firmados por el exalcalde Jaime Andrés Beltrán Martínez, que nombraba a jefes de control interno.
Vanguardia conoció que el pasado lunes, 29 de septiembre, Sánchez Ariza revocó los documentos correspondientes a la designación de Marta Liliana Cordero Gómez como jefe de control interno del Instituto de la Juventud, el Deporte y la Recreación de Bucaramanga, Inderbu; Ober Soto Solano como jefe de este despacho en la Empresa Social del Estado Instituto de Salud de Bucaramanga, Isabu; y el de Alid María Lindarte Rincón, quien iba como asesora de control interno en la Dirección de Tránsito de Bucaramanga.
Estas designaciones, junto a otras tres que no han sido revocadas, ya habían sido cuestionadas por el concejal de Cambio Radical, José David Cavanzo, quien criticó que de forma exprés se dieron esos nombramientos, justo un día después de que la Sección Quinta del Consejo de Estado dejó en firme la nulidad electoral de Jaime Andrés Beltrán Martínez y de que se confirmó su inminente salida de la administración municipal.
En el caso de Martha Liliana Cordero Gómez, el alcalde encargado de Bucaramanga argumentó que no se evidenció constancia de sus antecedentes fiscales, disciplinarios y judiciales. Es decir, no cumple con los requisitos para estar en este cargo que tiene una duración de cuatro años, iniciando en enero próximo.
“Que revisados los antecedentes documentales del Decreto 0732 del 19 de septiembre de 2025, no existe la constancia del numeral 2′) del artículo 2.2.5.1.5 del Decreto 1083 de 2015, a pesar de los certificados de antecedentes evidenciados. Lo anterior es un requisito para el nombramiento que debe agotarse de manera previa a la expedición del respectivo acto administrativo”, dice el decreto que revoca el nombramiento.
La designación de Ober Soto Solano también fue irregular debido a que tampoco cumplió con los requisitos anteriormente mencionados, razón por la cual no podría tomar posesión como jefe de control interno del Instituto de Salud de Bucaramanga, Isabu. Lo mismo se argumentó en el decreto de revocatoria de Alid María Lindarte Rincón, quien iba para la Dirección de Tránsito de la ciudad.
Las denuncias de “afán” para estos nombramientos
Un día después de que el Consejo de Estado rechazara los últimos recursos del alcalde de Bucaramanga,Jaime Andrés Beltrán Martínez, confirmando su nulidad electoral y su salida de la administración municipal,en la Alcaldía se apresuraron con la expedición de los decretos que nombran a los jefes de control interno. Mientras argumentan irregularidades desde la oposición, desde la Alcaldía dicen que fue “coincidencia” de las fechas.
Estos cargos, que tienen como finalidad vigilar el funcionamiento de las entidades, hacer auditorías internas y hasta revisar la ejecución del Plan de Desarrollo aprobado por el Concejo, tienen un sueldo que ronda los $10 millones y una duración de cuatro años.
Las alarmas las prendió el concejal de Cambio Radical, José David Cavanzo, quien argumentó a través de sus redes sociales que, de parte de la administración municipal, habría un interés en dejar nombrados estos cargos para que fueran designados directamente por el saliente alcalde Jaime Andrés Beltrán Martínez y no por quien llegue como encargado del Gobernador o como delegado de la terna que tendrán que presentar Colombia Justa Libres, el Partido de la ‘U’ y Salvación Nacional.
“Alcalde, recuerde que del afán solo queda el cansancio. Dejar nombrados los jefes de control interno de gestión sería un descaro. Ojo, que eso le puede traer más problemas. ¿Es cierto que ya tiene los nombramientos listos? ¿Por qué desde agosto, si el período inicia en enero?”, cuestionó Cavanzo.
Según explicó el concejal en diálogo con Vanguardia, si bien es cierto no se ha establecido en qué momento se deben nombrar los jefes de control interno, aunque su período inicia en enero, llamó la atención que estos decretos quedaran listos un día después de que se resolviera la situación jurídica de Jaime Andrés Beltrán Martínez en el Consejo de Estado.
“Mi denuncia es por qué hacerlo desde agosto. Yo no he dicho que hay un tema ilegal, pero es la coyuntura la que hace que no esté bien hecho. Cuando uno suma eso a la resolución, que es la metodología, estuvo escondida como un requisito para que nadie lo viera. Los decretos no estaban ni publicados”, afirmó José David Cavanzo.
Justamente, la Alcaldía de Bucaramanga publicó sobre las 00:00 horas del pasado martes, 23 de septiembre, seis decretos que nombran a seis jefes de control interno. Es decir, los documentos fueron ‘cargados’ a la página de la Alcaldía 10 horas después de la denuncia del concejal de Cambio Radical.
“Eso deja ver que ellos lo hicieron por debajo, que nadie se diera cuenta y, al momento en que yo pongo el tema, pues se apuran y publican los decretos. Y aparecen seis de nombramiento de jefes de control interno”, sentenció Cavanzo.