La reforma tributaria que debatirán las comisiones económicas del Congreso de la República tuvo varios cambios. Uno de ellos es el impuesto al carbono que afecta a combustibles como el Acpm, la gasolina y el carbón, entre otros combustibles fósiles.
La segunda reforma tributaria del Gobierno Petro se discutirá en el Congreso de la República tuvo algunos cambios en varios artículos clave. El principal factor es que bajará la intención de recaudo y se fijará en $9,8 billones.
Sin embargo, también se modificó el artículo que le pone más impuestos al carbono. Una de las modificaciones más importantes es la gradualidad con la que se aplicaría ese cambio tributario.
De acuerdo a lo proyectado en el artículo 21 de la reforma tributaria, combustibles como la gasolina, Acpm, Jet fuel (aviones), así como el carbón, el gas licuado de petróleo y el gas natural, entre otros, quedarían cobijados por ese impuesto. Esos cambios empezarían en 2025 y finalizarían en 2027.
Tras los cambios en los tiempos de aplicación de este nuevo impuesto, el presidente de Anif, José Ignacio López, explicó cuáles serán los alcances e impactos en los precios de los galones.
De acuerdo con López, si se aprueba la Ley de Financiamiento tal y como quedó ajustada, en los próximos cuatro años, el galón de la gasolina se podría incrementar $593, mientas que el galón del Acpm podría tener un ajuste de $680. Asimismo, el ajuste del Acpm sufriría un ajuste de $237 en 2028, a mitad del próximo Gobierno.
“Los impuestos al carbono son un instrumento importante en la transición energética, pero es importante calibrarlos bien para que tengan el efecto deseado. Un aumento súbito puede generar un efecto ingreso negativo e ir en contra de la adopción de energía más limpia, pero también más costosa”, afirmó el dirigente de Anif sobre este cambio.
A la realidad del ajuste de combustibles como el Acpm se suma el incremento que ha planteado el Gobierno para cerrar el déficit del Fondo de Estabilización de los Precios de los Combustibles, Fepc. Cabe recordar que este año no se logró el aumento esperado inicialmente por la cartera de Hacienda y el impacto en las arcas de la nación podría ascender a los $10,5 billones.
Frente a los cambios planteados en la reforma tributaria, la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas, ACP, se pronunció señalando que golpearían considerablemente al sector petrolero.
De acuerdo con ACP, la tributaria aumentaría la sobretasa del impuesto de renta para la exploración de petróleo hasta en 5 puntos porcentuales, llevándola hasta el 20 %. Según las proyecciones de ese sector, implicaría un impuesto de renta del 55 % para la industria, sumado al pago de regalías, derechos económicos, contribuciones sociales, ambientales y demás aportes, “desbordando con ello su capacidad contributiva y desincentivando sus inversiones en el país”.
“Como consecuencia de la reforma de 2022, las inversiones exploratorias se han reducido en un 57 %, lo que ha conllevado a que las inversiones voluntarias caigan a mínimos históricos. Aquí es importante considerar que, si no se hubiera debilitado al sector, no se necesitaría Ley de Financiamiento”, señaló Frank Pearl, presidente ejecutivo de ACP