En un recorrido hecho por Vanguardia en varias calles del centro, se pudo evidenciar el mal estado de estos recipientes.
Se disparó el robo de las bases metálicas de las cestas de basura en varios puntos de la capital santandereana; y las pocas que quedan están destruidas y oxidadas.
Vale recordar que el Municipio instaló el año pasado varias cestas de basura en zonas comerciales y residenciales, plazoletas y parques de Bucaramanga. Sin embargo, al poco tiempo este mobiliario se volvió blanco de personas inescrupulosas y delincuentes que las destruyen, las desvalijan y hasta se las roban.
La instalación de ese mobiliario exigió una inversión aproximada a los $ 9.000 millones.
De acuerdo con las autoridades policiales, una banda de personas, ‘amigas de lo ajeno’, se dedica a desmantelar estos elementos básicos del mobiliario urbano, dejando a su paso un panorama de desorden y desaseo.
El mayor vandalismo y hurto de las cestas se presenta en la zona céntrica de Bucaramanga, y también en los barrios Alfonso López, Diamante II, Bolívar, García Rovira y Morrorrico. En todos esos sectores, según calculan las autoridades, se presenta al menos el 70 por ciento de los hurtos y hechos de vandalismo; mientras que el 30 por ciento restante ocurre en los barrios La Aurora, Chapinero, La Concordia, Cabecera, Álvarez, Mutis y San Alonso.
El problema grave es que, ante los daños en tales recipientes, la basura se acumula y eso le da un mal aspecto a la ciudad.
En sectores como la zona Centro, según los propios comerciantes formales de las calles 33, 34, 35 y 36, la banda de ladrones opera bajo la complicidad de la noche, desprendiendo las bases de las cestas con herramientas especiales. Luego, se presume que las venden como chatarra a precios irrisorios.
“No podemos permitir que ese tipo de acciones impunes continúen”, señaló la Alcaldía de Bucaramanga.

“La seguridad y el bienestar de nuestros ciudadanos son prioritarios, y estamos tomando medidas para detener a los responsables”, agregó.
El Municipio anunció un plan de acción que incluye aumentar la vigilancia en las zonas afectadas, instalar cámaras de seguridad y colaborar con la Policía Metropolitana para la captura de los delincuentes.
Las autoridades instan a la ciudadanía a reportar cualquier actividad sospechosa relacionada con el robo de tales canecas.
Se debe recordar que el robo de las bases de las cestas de basura no solo afecta la estética de la ciudad, sino que también genera un riesgo para la salud pública, pues la falta de estos elementos facilita la proliferación de plagas. La acción de esta banda criminal impacta negativamente la gestión de residuos sólidos.
Se espera que con la colaboración de la gente y las medidas tomadas por las autoridades se logre frenar esta preocupante tendencia y recuperar la limpieza y seguridad de las calles.