Con la coalición de gobierno desintegrada, el cabildo instaló el tercer periodo de sesiones ordinarias del 2023, en el que se discutirán proyectos de acuerdo claves como la liquidación de Metrolínea y la revisión del POT, entre otros.
El pasado domingo, primero de octubre, sin la presencia del alcalde Juan Carlos Cárdenas, se instaló el tercer periodo de sesiones ordinarias en el Concejo de Bucaramanga para la vigencia 2023, el último de su mandato.
Por primera vez desde que inició el gobierno Cárdenas, la administración tendrá la mayoría de los concejales en contra debido a la determinación de Cambio Radical y el Partido Liberal de declararse en oposición, luego de tres años y nueve meses en la coalición de gobierno.
Este nuevo escenario pone en desventaja a la administración municipal que en el epílogo de su mandato busca impulsar ante el Concejo proyectos de suma importancia para la ciudad como la liquidación del Ente Gestor de Metrolínea, la revisión extraordinaria del Plan de Ordenamiento Territorial, POT, o una reestructuración de la planta de personal de la Alcaldía, entre otras iniciativas.
“En principio, los partidos de oposición deberían de oponerse a los proyectos del alcalde. Por inconvenientes, los proyectos de acuerdo que presente el alcalde para aprobar que impliquen grandes inversiones independientemente de si son de oposición o no, van a tener dificultades en el Concejo porque estamos en un periodo electoral y a partir del 29 de octubre hay un nuevo Concejo y un nuevo alcalde elegido”, asegura el politólogo Julio Acelas.
Voceros del gobierno del alcalde Cárdenas afirman que todos los proyectos cuentan con las normativas de ley y buscan suplir necesidades imperativas para el desarrollo de la ciudad, sin embargo, serán los concejales los que deben asumir el costo político y legal de la no aprobación de los mismos.
“Nosotros radicamos los proyectos conforme nuestra obligación legal, conforme a los procesos que hemos venido adelantando, por ejemplo, la revisión del POT lleva más de dos años en construcción y lo de Metrolínea, son una directriz de la asamblea de accionistas y del Gobierno Nacional. Los concejales son los que tienen la responsabilidad política y legal de ver la pertinencia de los proyectos y por supuesto pensar en la ciudad. Nosotros como gobierno cumpliremos con su radicación y sustentación”, indicó a vanguardia Saharay Rojas, jefe de Gobernanza de la Alcaldía de Bucaramanga.
En un carta dirigida a la bancada en el Concejo, el veedor nacional del partido Liberal, Rodrigo Llano, recordó que la colectividad semanas atrás se declaró en oposición al gobierno Cárdenas, razón por la cual exhortó a los tres cabildantes a votar negativamente todos los proyectos de origen ejecutivo.
“Quiero recordar que el Partido Liberal se declaró en oposición al actual alcalde, en consecuencia, es obligatorio para la bancada de concejales liberales, votar negativamente los proyectos presentados por la Alcaldía al Concejo de Bucaramanga”, dicta la misiva.
En tal sentido, los concejales Javier Ayala, Robín Hernández y Francisco González, del Partido Liberal, deberán oponerse, argumentar de manera crítica o votar negativamente los proyectos de Cárdenas.
Situación similar ocurre con el partido Cambio Radical que también se declaró en oposición a la administración Cárdenas y de paso le solicitó a las autoridades celeridad en las investigaciones disciplinarias en contra del actual mandatario y por presuntas irregularidades en contratación.
De este modo, los concejales Wilson Ramírez y Cristian Reyes deberán asumir una actitud fuertemente crítica y cristalizarlo con su votación frente las iniciativas de la Alcaldía.
Con las decisiones de Cambio Radical y el liberalismo de declararse en oposición, el Concejo de Bucaramanga recompuso sus fuerzas en las que la oposición pasa a estar conformada por 13 concejales (cuatro de la Liga, dos de la Alianza Verde, uno de Colombia Justa Libres, uno del Pacto Histórico, tres liberales y dos de Cambio Radical).
Por otra parte, la coalición de Gobierno pasa a ser minoría con los concejales de los partidos Conservador, Mais, ASI, Centro Democrático, Hagamos Ciudadanía y Verde, aún cercanos a la administración Cárdenas.