Se cumplieron dos años y dos meses de la muerte de Helen Johana Gélvez Cristancho, una barranqueña que perdió la vida luego de practicarse una cirugía estética en Bucaramanga. Su familia sigue esperando respuestas y exigiendo que se haga justicia.
Han pasado dos años y dos meses desde que Helen Johana Gélvez Cristancho, una madre de 33 años, oriunda de Barrancabermeja, falleció tras someterse a una cirugía estética en Bucaramanga. Lo que empezó como un procedimiento para aumentar su busto, terminó en una tragedia que dejó a su familia destrozada y sin respuestas claras.
Los avances del caso
Anderson Aceros, abogado de la familia de Helen Gélvez, aseguró que, pese a que han pasado más de dos años, el proceso ha avanzado lentamente ante la justicia. Sin embargo, resalta que la semana anterior recibieron un informe de la Fiscalía en el que se pudo conocer que existió un mal procedimiento dentro de la cirugía que se le practicó a la mujer.
“El último avance lo conocimos el día de ayer (12 de septiembre) y se puede establecer con lo que recibimos que existió realmente un mal procedimiento, y en este caso ya se estarían dando las indicaciones para realizar las imputaciones correspondientes al equipo quirúrgico, quienes tienen una responsabilidad penal. Es decir, con los análisis actuales se puede decir que no fue una situación de salud de la paciente lo que provocó su deceso, sino que hubo una intervención que deterioró su estado”, explicó.
El abogado afirmó que, desde el día del fallecimiento de Helen, el caso quedó en manos de las autoridades, lo que hizo que la familia mantuviera la esperanza de que la muerte de su ser querido sería esclarecida y que pronto sabrían si hubo negligencia médica y si la clínica cumplía con los estándares requeridos por la ley. Sin embargo, dos años después, aún no se sabe realmente qué ocurrió dentro del quirófano.
“Hemos tenido un padecimiento en el sentido de que la investigación ha sido extremadamente lenta. Se entiende que procesalmente la Fiscalía tiene sus tiempos y términos para indagar el caso, sin embargo, hemos elevado algunas peticiones especiales como víctimas, pero no hemos recibido ninguna respuesta ni negativa ni positiva. Lo que la Fiscalía nos indica es que tienen mucho trabajo”, expresó el abogado.
La familia de Helen sigue esperando que la justicia actúe, que se aclaren los hechos y que se determinen las responsabilidades, si las hubiera. “Hemos tomado el tiempo necesario para esperar que la Fiscalía nos dé un dictamen o algo con certeza, porque al final lo que nosotros buscamos es justicia. No queremos otra cosa, sino que se haga justicia, porque dos niños quedaron sin madre tras su fallecimiento. Ellos me preguntan por su mamá todos los días”, dijo entre lágrimas Jhon Jairo Carrascal, esposo de Helen.
Según el abogado, a pesar de que inicialmente se dio un sellamiento temporal del establecimiento donde se practicó la cirugía, actualmente sigue funcionando.
Así fue la muerte de Helen
El 1 de julio de 2022, Helen viajó a Bucaramanga con la esperanza de realizarse una cirugía que, según los exámenes prequirúrgicos, no debía presentar complicaciones. Días antes, la mujer había contactado un centro estético en Barrancabermeja, donde le ordenaron los exámenes. Posteriormente, con los resultados en mano, le agendaron la cirugía en una clínica del barrio Cabecera de Bucaramanga.
Dentro de los nuevos detalles que se conocen del caso, se reveló que, para esa época, el centro estético de Barrancabermeja que contrató Helen arrendó el quirófano de la clínica estética de Bucaramanga para poder llevar a cabo la cirugía.
“Es importante aclarar que la responsabilidad en este tipo de situaciones recae sobre ambas partes. El procedimiento se llevó a cabo en una clínica de Bucaramanga, pero las evaluaciones prequirúrgicas se realizaron en Barrancabermeja, en un centro estético”, destacó el abogado.
Ese día, sobre las 11:15 de la mañana, Helen ingresó al quirófano mientras, Jhon Jairo, su esposo, esperaba impacientemente. Solo fue hasta las 4:30 de la tarde cuando la cirujana le informó que el procedimiento había terminado.
Volví a preguntar por ella a las 5:30 p.m., luego a las 6:30 p.m., pero no me decían nada. Finalmente, me informaron que Helen no despertaba y que iban a esperar una hora más. Según el anestesiólogo, tras una hora comenzaron las complicaciones, y aunque el cirujano preguntó si debía detener el procedimiento, el anestesiólogo le dijo que continuara, que él la estabilizaría, y así fue”, relató Jhon Jairo Carrascal, esposo de Helen.
La mujer salió con vida de la cirugía, pero con el pasar de las horas su cuerpo no despertó, por lo que el personal a cargo del procedimiento estético decidió trasladarla a la Clínica Bucaramanga, ya que en el lugar no había área de hospitalización ni UCI para monitorearla.
“La trasladaron a la clínica, la ingresaron a UCI y, tras un rato, subí a verla. Al día siguiente, según los exámenes, me explicaron que tenía una isquemia cerebral, que la iban a tratar y que debíamos esperar a que el cerebro se desinflamara, lo cual tomaría entre dos y tres días. Después de eso, se esperaba que despertara bien”, relató el esposo.
Helen permaneció 10 días internada en la UCI sin mostrar mejoría, hasta que finalmente le diagnosticaron muerte cerebral. El 11 de julio de 2022, en horas de la noche, se reportó su fallecimiento.
La barranqueña era madre de dos pequeños, una niña de tres años y un niño de diez. Vivía junto a su familia en la vereda El Quemadero, en el corregimiento El Centro de Barrancabermeja, donde había construido su hogar con Jhon Jairo Carrascal, su esposo durante 11 años y quien hoy sigue reclamando justicia.
“Lo único que queremos es saber la verdad, qué fue lo que pasó dentro de ese quirófano, y que esa verdad salga a la luz. Creo que dos años es tiempo suficiente para que la Fiscalía pueda entregar resultados”, puntualizó el esposo.