Una serie de oscuros secretos empieza a salir a la luz en torno a Kanye West, su esposa Bianca Censori y su exasistente. Entre demandas, revelaciones inquietantes y un escándalo en los Grammy, la trama se vuelve cada vez más siniestra.

Era una noche de luces y cámaras en la alfombra roja de los premios Grammy 2025. La multitud contenía la respiración al ver a Bianca Censori, la joven esposa de Kanye West, caminando junto a él. Pero no era su presencia lo que generaba murmullos, sino el impactante atuendo –o más bien la ausencia de él– que dejaba su cuerpo completamente expuesto. “Ella necesita mi aprobación”, declararía más tarde el propio West en un arranque de ego desbordado, alimentando el fuego de las críticas.

Este episodio, aunque llamativo, no es más que una pieza en el retorcido rompecabezas que es la vida de Ye, el hombre que nunca deja de generar titulares. Bianca, de 30 años, una vez arquitecta promesa en Melbourne, se ha transformado en otra de las “creaciones” de West. Desde su matrimonio en 2022, su aspecto físico ha cambiado radicalmente, su vestimenta ha alcanzado niveles extremos, y sus apariciones públicas no dejan de causar controversia. Pero este espectáculo tiene un trasfondo aún más perturbador.

El detonante del actual escándalo vino de una voz inesperada: Lauren Pisciotta, exasistente personal de Ye. En junio del año pasado, Pisciotta presentó una demanda contra él, acusándolo de acoso sexual y despido injustificado. Entre las pruebas que aportó, hay una captura de pantalla que muestra un diálogo escalofriante. Según su versión, Kanye le habría dicho a Bianca: “Quiero acostarme con tu madre antes de que se vaya”. La situación toma un giro aún más siniestro cuando Pisciotta relata que Ye le preguntó si Bianca estaría dispuesta a presenciar ese acto.

La madre de Bianca, Alexandra Censori, rompió el silencio ante los medios. Con voz serena pero firme, declaró: “Somos personas normales, viviendo nuestras vidas de la manera más privada posible”. Sin embargo, las insinuaciones de Pisciotta no se detienen ahí. La exasistente también afirmó haber sido drogada y agredida sexualmente durante una fiesta organizada por Sean “Diddy” Combs, así como haber recibido mensajes y fotos explícitas de West. Las sombras sobre el rapero se hacen más densas.

Mientras tanto, Japón reaccionó de forma contundente ante el polémico desnudo de Bianca en los Grammy. En un país que se ha sumado recientemente al movimiento #MeToo, los promotores de West cancelaron dos conciertos por un valor de veinte millones de dólares. Allí, el comportamiento de Kanye ha sido interpretado como un acto de control coercitivo sobre su esposa. En este contexto, su figura no es vista como la de un genio creativo, sino como la de un hombre al borde del abuso de poder.

La pregunta que flota en el aire es clara: ¿Bianca es una víctima atrapada en un juego de manipulación o está participando voluntariamente en esta trama de escándalos y excesos? Muchos señalan que en su última aparición en la alfombra roja, su incomodidad era evidente. “No logró ocultar el nerviosismo”, comentó un experto en comportamiento corporal. Pero Kanye, como siempre, se mostró impasible, disfrutando del espectáculo que había creado.

Kim Kardashian, exesposa de West y madre de sus cuatro hijos, ha mantenido un silencio calculado. Algunas fuentes cercanas aseguran que ha expresado preocupación por la influencia que esta dinámica pueda tener sobre North, la mayor de sus hijos, de apenas 11 años. “Kim nunca dejó de ser una celebrity ultrafamosa”, dicen quienes la conocen, “pero sabía cómo navegar los peligros de la fama”. Ahora, observa desde las sombras cómo su exmarido parece llevar a otra mujer al borde del abismo.

El caso sigue en los tribunales, donde se resolverán las denuncias presentadas por Pisciotta. Mientras tanto, los rumores sobre un posible divorcio entre Kanye y Bianca se mantienen en el aire, aunque ellos se encargan de desmentirlo con paseos públicos y muestras de afecto estratégicas. Sin embargo, en el universo de Ye, la verdad nunca es lo que parece a primera vista.

Cuántos hijos tiene Kanye West?

Kanye West, ahora conocido como Ye, es un destacado rapero, productor y diseñador de moda estadounidense. Nació el 8 de junio de 1977 en Atlanta, Georgia, y se crió en Chicago, Illinois. A lo largo de su carrera, ha sido una figura influyente en la música y la moda, además de generar numerosas controversias por sus declaraciones y comportamientos públicos.

En abril de 2012, Ye comenzó a salir con la estrella de telerrealidad Kim Kardashian. La pareja se comprometió en octubre de 2013 y se casó en mayo de 2014 en una ceremonia privada en Florencia, Italia. Su relación atrajo una atención mediática significativa debido a su alto perfil en la industria del entretenimiento.

Juntos, Ye y Kim tuvieron cuatro hijos: North West: nacida en junio de 2013; Saint West: nacido en diciembre de 2015; Chicago West: nacida en enero de 2018 mediante gestación subrogada y Psalm West: nacido en mayo de 2019 también por gestación subrogada.

En febrero de 2021, Kim Kardashian solicitó el divorcio, citando diferencias irreconciliables. El divorcio se finalizó en noviembre de 2022, con ambos acordando la custodia compartida de sus hijos. Ye fue ordenado a pagar $200,000 mensuales en manutención infantil y a cubrir el 50 s% de los gastos médicos, educativos y de seguridad de los niños.

Tras el divorcio, Ye contrajo matrimonio con Bianca Censori en diciembre de 2022 en una ceremonia privada. Bianca es arquitecta y ha trabajado en la marca Yeezy de Ye. Su relación ha sido objeto de atención mediática debido a las elecciones de moda de Bianca y las apariciones públicas de la pareja.

Recientemente, Ye ha estado en el centro de varias controversias, incluyendo una demanda por acoso sexual presentada por su exasistente, Lauren Pisciotta, y críticas por la vestimenta de Bianca en eventos públicos. Además, Ye reveló que su esposa Bianca Censori jugó un papel crucial en su diagnóstico de autismo, lo que ha añadido otra capa de complejidad a su ya multifacética vida pública.

A pesar de las polémicas, Ye continúa siendo una figura influyente en la cultura popular, y su vida personal y profesional sigue siendo objeto de intenso escrutinio mediático.

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