La llegada del recibo de gas generó la manifestación en el área metropolitana de Bucaramanga.
En Bucaramanga ya comenzaron a llegar las facturas del servicio de gas, con los incrementos tarifarios que se advirtieron desde principios de año. Los primeros en hacer público su descontento son los propietarios y administradores de establecimientos de comidas.
Comerciantes y empresarios del sector gastronómico en la capital santandereana están indignados con estas alzas en las facturas del gas. Ellos iniciaron la convocatoria para llevar a cabo una jornada de protestas, el próximo viernes 21 de febrero, a partir de la 1:30 p.m., en la sede de Vanti – Gasoriente (diagonal 13 # 60A-54).
Hablamos de afectaciones contra negocios de comidas rápidas, almuerzos ejecutivos y de ‘corrientazo’, gastrobares, cadenas de restaurantes, entre otros establecimientos de este tipo.
Conforme con lo indicado por Vanti a principios del presente mes, en ciudades como Bucaramanga se advierten alzas de hasta 36 % en la prestación del servicio de gas, aumentos que se verán reflejados a partir de febrero actual.
Conforme con lo indicado por Vanti a principios del presente mes, en ciudades como Bucaramanga se advierten alzas de hasta 36 % en la prestación del servicio de gas, aumentos que se verán reflejados a partir de febrero actual.
“Bucaramanga entró en la lista de ciudades donde más aumentó la tarifa de gas. El gremio de los restaurantes es el más afectado por un alza en la que nadie asume responsabilidad. Como Alcalde alzo la voz por mi ciudad y los ciudadanos perjudicados”, expresó la primera autoridad de la capital santandereana.
Por su parte, Vanti ha argumentado desde comienzos del presente mes que dichos incrementos se realizan “debido al aumento del precio de la molécula de gas natural y el mayor costo por la distancia del transporte debido al cambio en las fuentes de suministro”.
La compañía detalló que » el mayor costo del gas nacional a partir del 2025, la necesidad de incorporar gas importado para poder atender toda la demanda nacional, y el hecho de que las nuevas fuentes de suministro de gran parte del interior del país se encuentran en la Costa Caribe y aumentan los costos de transporte, han hecho inevitable este incremento en ciudades como Bogotá, Medellín, Bucaramanga, Villavicencio, Manizales, Pereira, Armenia, Ibagué, Neiva o Yopal, entre otras.