El servicio de agua está en vilo para 1.700 familias de 19 veredas de Barichara y Villanueva. Conozca acá por qué.
La decisión de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios de suspender el Registro Único de Servicios Públicos, RUSP, al Acueducto Regional Cooperativo El Común, Acuascoop, tiene en vilo la prestación del servicio de agua a 1.700 familias de las zonas rurales de Barichara y Villanueva.
Este hecho, además, reitera la necesidad de encontrar por un fin una solución al problema de abastecimiento que enfrentan estos municipios.
En la resolución emitida el 4 de julio de este mes y que fue apelada hace unos días (25 de julio), el ente general argumenta que, por estar vendiendo agua sin tratar a los residentes de la zona rural, es decir, cruda, no potable, la empresa no puede ser vigilada por ellos y, por lo tanto, no puede tener el RUPS, es decir, no estarían autorizados para vender el agua con micro medición como lo hacen en la actualidad.
Néstor Álvarez, gerente de Acuascoop dijo que no se entiende una decisión de esta naturaleza por parte de la Superservicios, porque en primer lugar nunca se les notificó que estuvieran en una investigación, la empresa está cobijada bajo un régimen especial y esta es la única alternativa que tienen estos municipios para la prestación del servicio.
Acuescoop abastece al casco urbano de Barichara con agua cruda
Acuascoop, teniendo la represa El Común como su principal escenario de almacenamiento, le vende el agua en bloque sin tratar a los acueductos urbanos de Barichara y Villanueva en donde es potabilizada antes de distribuirse, en temporadas de verano hace lo mismo con Cabrera y tiene usuarios directos en 19 veredas (12 de Barichara y 7 de Villanueva).
Álvarez insistió en que en este caso se le están violando los derechos a la unidad de servicios, que ellos no cobran el agua potable y en este caso se está poniendo en riesgo un servicio vital para todos los usuarios rurales que no tienen más alternativas.
Milton Chaparro, alcalde de Barichara, aseveró que es incomprensible cómo, mientras las comunidades llevan décadas esperando, la ayuda del Gobierno Nacional para garantizar el abastecimiento de agua en las áreas rurales y urbanas, las entidades toman determinaciones que afectan a todos y los dejan en un verdadero dilema.
Ya es hora de que le cumplan a Barichara con el agua
El mandatario expresó que la resolución de la Superservivcios lo único que hace es ratificar la urgencia de que el Estado tome una decisión definitiva frente a la construcción del nuevo acueducto para estos municipios, porque llevan muchos años en estudios y aún nada.
Juan Carlos Rey, vocero de la veeduría del Agua y EOT, explicó que este proceso marca un punto de inflexión, que se espera termine en el fortalecimiento de Acuascoop y así se deje de poner en riesgo la vida de los habitantes de las zonas rurales que deben recibir agua cruda, expuestos a todo tipo de enfermedades gastrointestinales.
En este caso, Rey aseveró que dentro de la mesa técnica que tienen autoridades locales y comunidad con la Empresa de Servicios Públicos de Santander, ESANT, se ha propuesto invertir en mejorar las capacidades del acueducto con la construcción de una planta de tratamiento ya sea para tratar el agua de las zonas rurales o toda el agua que va para los acueductos municipales, la ampliación de un metro de la represa El Común y la compra de terrenos de la zona alta de la quebrada La Laja de donde se abastece la represa.
“Ahora el problema actual es por la micromedición, tienen que evaluar una opción para vender el agua a las zonas veredales sin ese modelo”, dijo Rey.
Álvarez dijo que ya Acuascoop lleva adelantado un 80 % los estudios y diseños para la construcción de una planta de tratamiento de agua potables para atender el sector rural.
Por último, todos están a la espera de la aprobación técnica del nuevo proyecto que la ESANT presentó ante el Gobierno Nacional que implicaría llevar el agua desde el río Mogoticos hasta la represa El Común.
Mientras todo eso pasa, el tema es como va se va solucionar el problema actual, porque lo cierto del caso es que las comunidades rurales no se pueden quedar sin agua, eso lo entienden todos los habitantes de la región.