Israel ha comunicado a los mediadores de Catar que podría ofrecer ciertas contrapartidas a cambio de la liberación por el grupo islamista palestino Hamás de un número significativo de rehenes que mantienen en su poder en Gaza y que fueron secuestrados tras el ataque terrorista contra territorio israelí del pasado día 7, informó este viernes la emisora pública israelí Kan.
Según la información de la emisora pública de Israel, citada por otros medios de este país, una fuente política no identificada no especificó cuáles serían dichas contrapartidas, aunque podrían no estar relacionadas con la entrada de combustible en Gaza por temor a que pueda ser utilizado por Hamás.
Desde diversos ámbitos internacionales se le ha pedido a Israel que permita la entrada de cierta cantidad de combustible que sirva al menos para activar los sistemas de energía y agua de la Franja, que están completamente colapsados y han supuesto la paralización del ya de por sí precario sistema hospitalario e incluso de las labores de asistencia de la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA).
Al menos oficialmente, Israel ha sostenido que no está dispuesto a hacer ningún intercambio para conseguir la liberación de los aproximadamente más de 200 rehenes en poder de Hamás, autor del mayor ataque terrorista en la historia del Estado judío y en el que murieron más de 1.400 personas.
Pese a esta contundente posición oficial, los medios de Israel sostienen que no está claro si las autoridades de este país dieron algún tipo de contraprestación por la liberación de cuatro rehenes por parte de Hamás, una madre y su hija, ambas con doble nacionalidad estadounidense-israelí, y dos ancianas israelíes.
Según Kan, Israel ya ha transmitido a los mediadores cataríes cuáles son sus líneas rojas y sus requisitos para una eventual negociación.
Al parecer, Hamás exigiría como condición para proceder a nuevas liberaciones la entrada de combustible en Gaza, un alto el fuego y la puesta en libertad de los llamados de presos de seguridad que permanecen en las cárceles israelíes.
Sin dar más detalles, la fuente anónima citada por Kan insinuó que pronto se produciría un acontecimiento importante en las conversaciones.