La comunidad reportó que se trata de una plaga que ha causado graves daños en árboles y vegetación. Además de las zonas verdes, los gusanos invadieron las viviendas y los vecinos se los encuentran hasta en la ropa. Solicitan la intervención de las autoridades.
En los últimos días algunos vecinos trataron de cortar el avance de esta plaga, con el uso de plaguicidas e incluso con fuego. Sin embargo, señalan que se trata de una infestación grande, descontrolada y resistente. (Fotos: Suministradas / VANGUARDIA)
Asombrados y preocupados ante la gran cantidad de gusanos que repentinamente aparecieron en sus viviendas se encuentran los habitantes de dos sectores residenciales en Bucaramanga. Los afectados dicen desconocer de qué insecto se trata.
Las familias perjudicadas a raíz de esta infestación de gusanos señalan que se trata de una plaga que rápidamente se reproduce, y que además genera graves perjuicios contra los recursos naturales, como los árboles y la vegetación.
En imágenes suministradas por las comunidades afectadas se evidencia la gravedad de esta infestación. Los gusanos invadieron en tal cantidad que se observan paredes parcialmente cubiertas por decenas de estos bichos.

Estos gusanos están apareciendo en sectores como Miramanga y Buenavista (Comuna 14). Primero fueron unos pocos, pero ya se ven por montones. En los últimos siete días esta plaga se propagó de forma impresionante”, reportó Rubiela Jaimes, habitante del sector.

“Los encontramos hasta en la ropa”
Los residentes de dicho sector de Bucaramanga comenzaron a notar el incremento en la cantidad de estos gusanos, según señalan, desde hace dos semanas. Advirtieron que en la última semana fue alarmante el aumento en el número de insectos.
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La comunidad reportó que ya se evidencian graves impactos negativos contra la naturaleza, a raíz del exponencial aumento de esta plaga.

“Nunca en mi vida vi una cosa así. La invasión de gusanos es muy grande. Varios árboles ya se secaron. Estos gusanos caen de los árboles como si se tratara de lluvia. Son cantidades impresionantes. Dejaron varios Caracolí sin hojas, totalmente secos”, relató otra habitante de la zona.
En los últimos días algunos vecinos trataron de cortar el avance de esta plaga, con el uso de plaguicidas e incluso con fuego. Sin embargo, señalan que se trata de una infestación grande, descontrolada y resistente.
“Ya no sabemos qué hacer. La situación está fuera de control. Los gusanos se metieron a las casas y ya están por todo lado, los encontramos hasta en la ropa y las cobijas. Estos gusanos tienen púas blancas que generan picazón, queman la piel y causan alergias”, agregó Jaimes.

Según la comunidad, dicha eventualidad ya fue alertada ante la Corporación Para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, Cdmb.
